¿Tecnología elitista?

Días atrás la Cámara de Diputados aprobó y giró al Senado un proyecto del Poder Ejecutivo que reduce impuestos internos para la producción de artículos electrónicos en la provincia de Tierra del Fuego y aumenta el gravamen para aquéllos que no se produzcan en la isla.

Esta medida -que abarca a teléfonos celulares, cámaras digitales y monitores, entre otros productos- causó el inmediato rechazo de la Cámara de Informática y Comunicaciones (Cicomra) dado que "provocaría un aumento en los precios de los productos tecnológicos de hasta 34 por ciento, ya que duplica en algunos de ellos la alícuota del IVA que se les aplica, además de fijar impuestos internos por considerarlos bienes suntuarios", según argumentó la entidad.

La medida grava los productos electrónicos importados así como los fabricados en el país con la excepción de una selección específica producida en Tierra del Fuego, con lo cual busca desarrollar el polo tecnológico en ese territorio austral.

Sin embargo, para los empresarios del sector, la iniciativa tiene paradojas y contradicciones dado que en pos de fomentar el empleo y la producción en plantas fueguinas, antentaría contra la actividad en el resto del país. Asimismo, destacaron que varios artículos a los que se les aplicaría el gravamen ni siquiera se fabrican en el país.

En ese sentido, el responsable de Núcleo (ensambladora y distriubuidora mayorista) y la cadena minorista Delta Computación, Maximiliano González Kunz, advirtió que la aplicación del impuesto en cuestión convertiría en "elitistas" a productos que hoy son de consumo masivo.

En la misma sintonía el titular del distribuidor mayorista de hardware e insumos "partes informáticas.com", David Kandin, opinó que esta ley "lo único que va a hacer es alejar a la gente de los artículos tecnológicos".

De esta manera, ambos empresarios dialogaron con LA CAPITAL sobre el impacto en el consumidor final y la afectación sobre el mercado marplatense. Asimismo, coincidieron que en caso de aprobarse el impuesto se provocará "un retroceso" y "una brecha tecnológica".

Contradicciones

Para David Kandin, se trata de "una medida bastante impopular" signada por "un retroceso muy grande dado que perjudica mucho más de lo que beneficia".

"El Gobierno busca desarrollar un polo tecnológico en Tierra del Fuego, donde hay 5.600 personas. Ellos pretenden que con la plata que surja de este impuesto se generen más fuentes de trabajo y que las empresas se trasladen allí. De acá a que eso se logre va a pasar mucho tiempo y será peor el perjuicio a las empresas que van a ver disminuidos sus ingresos, mientras que los empleos de acá van a cesar porque esto va a bajar la comercialización y el consumo. También es un retroceso para el usuario final".

Asimismo, sostuvo que "la tecnología a nivel internacional no depende nada de la Argentina porque nuestro país no está posicionado en el mundo".

Tras calificar al proyecto de ley como "proteccionista", el responsable de "partesinformáticas.com" contrapuso que "muchos de los productos que abarcaría este impuesto no tienen puntos de comparación con la industria nacional dado que artefactos como teléfonos inteligentes o GPS no se fabrican en Argentina y a duras penas se comercializan aquí".

"Por ejemplo, -continuó- el iPhone 3GS ni siquiera existe en el mercado nacional, todavía no llegó. Entonces son artículos meramente importados en los que no hay nada que hacer para competir contra ellos".

Y agregó: "Es una medida que va a igualar a todos para abajo. Se habla de que son artículos suntuarios, pero son artefactos productivos que sirven para estar conectados. Gravarlos con una tasa también es retroceder en la producción".

Ante este cuadro de situación, Kandin consignó que en su empresa uno de los artículos afectados serán las cámaras fotográficas digitales. "Esto comprende a las primeras marcas como Nikon o Sony y las alternativas como Ginux. Todas serán encarecidas en el mismo porcentaje, claro que las de mayor precio serán recontra caras", enfatizó.

Seguidamente, puso énfasis a su argumentación con un ejemplo local. "Imaginate que en Mar del Plata hay un proyecto para poner un GPS en cada taxi y ahora se lo quieren encarecer un 30%. ¿Eso también es un artículo de lujo?. Es una medida a contramano del mundo".

"Siempre el último eslabón de la cadena es el consumidor final, dado que cualquier medida que intenta gravar un producto atenta contra el bolsillo de la gente", concluyó Kandin.

Notebooks y PC

Por su parte, Maximiliano González Kunz hizo la salvedad de que esta propuesta parlamentaria no comprende a las notebooks y computadoras de escritorio.

Aunque aclaró que "si el proyecto hubiera salido como venía de base (con las portátiles incluidas) hubiera caído fuertemente la demanda de un producto que viene teniendo un crecimiento de 35% y para el año que próximo la tendencia subirá 50%. Pero, al aumentarle 1.000 pesos al precio que tienen haría que la gente se retraiga".

"Hoy cualquier consumidor puede acceder a la tecnología, pero el encarecimiento convertiría a las notebooks u otros productos en artículos elitistas".

El responsable de la distribuidora Núcleo y Delta Computación indicó que si el proyecto impositivo no se modificaba "a nosotros nos hubiera afectado más porque además somos fabricantes de la marca Eurocase para todo el país. Importamos todas las partes y las hacemos acá, en Mar del Plata. Y como venía de base la ley para apoyar a Tierra del Fuego, donde no hay fabricantes de notebooks, nos habría impactado terriblemente y se llevaría a gente que hoy no está en el mercado productivo".

"La verdad -añadió- es que fabricación real no hay en la Argentina. Lo que existe es un ensamblado de partes en la que se utilizan logística y recursos humanos, pero no se hacen componentes".

De todas formas se mostró expectante "porque Senadores podría incluir la notebooks, enviarla a Diputados y sancionar la ley".

Otras paradojas

Para González Kunz este posible nuevo impuesto "es un manotazo de ahogado mal hecho. Es un desastre porque están promoviendo una zona que hoy no es de fabricación real porque una cámara digital no la van a fabricar, sino que la ensamblarán".

En tanto, destacó que quienes impulsan el proyecto "hablan de productos suntuosos, cuando hay 40 millones de celulares en la Argentina. Y hacer que eso se encarezca es atrasar al país en el tiempo".

"Se producirá nuevamente una brecha tecnológica muy importante dado que a la gente le costará mucho más llegar a una notebook, a un celular o una cámara digital".

Además remarcó que la medida traerá aparejado "un contrabando generalizado en el país, porque no creo que tengamos una frontera y una Aduana cercada totalmente. Entonces esto acarreará un mercado ilegal, cuando hay en el país un sector sin subsidios del Estado, con recursos blanqueados, con empleados y generación de puestos de trabajo".

Los artículos

En cuanto a los aparatos que comercializa en particular, el responsable de Núcleo indicó que la medida le afectará principalmente en los monitores "porque tenemos una distribución muy grande de LG y tendremos que evaluar cómo queda posicionado el producto y cómo surgen nuevas marcas. En tanto, en cámaras digitales somos distribuidores de Kodak, pero creo que ahí no se generará tanto impacto porque que hoy salen 600 pesos y si aumentan a 799 seguirán estando cerca de la gente; pero no es lo mismo que ocurra en una notebook que pasaría de salir 3.500 pesos a 4.500 o 5.000.

Sobre los teléfonos móviles inteligentes, comentó que "hoy en Estados Unidos un Blackberry es un producto de oficina y esa tendencia estaría llegando a nuestro país. Pero con esta medida acá no se van vender. Entonces, el acercamiento a esos productos será imposible y en Argentina nadie va a dejar de utilizar el teléfono celular, pero la gente podrá acceder a productos que se dejan de utilizar en otras partes del mundo".

"Hoy, los artículos que se están presentando en otros países llegan a la Argentina; pero con esta medida nos vamos a volver a atrasar", concluyó Maximiliano González Kunz.

Los artefactos

El proyecto aprobado en Diputados para aumentar el gravamen para artículos que no se produzcan en Tierra del Fuego incluye: cámaras digitales, GPS, teléfonos celulares, monitores LCD sin entrada de DVI, videomonitores, calentadores, teléfonos fijos, equipos electrónicos para home theatre (parlantes y amplificadores), contestadores telefónicos, aparatos de reproducción y grabación de sonido y aire acondicionado.