El fabricante de robots japonés Suidobashi Heavy Industries aceptó el duelo lanzado por su competidor estadounidense Megabot y se medirá en una batalla de autómatas gigantes.
Aunque aún no se anunciaron ni la fecha ni el lugar, un robot nipón de 4.000 kilos, y un estadounidense de 5.400, se verán pronto las caras en lo que muchos esperan que sea el inicio de un nuevo tipo de espectáculo que ya sido profusamente retratado en obras de ciencia ficción: las batallas de robots gigantes.
Megabot publicó un video cargado de humor presentando su Mark II "el primer robot gigante pilotable completamente funcional" de Estados Unidos.
Al son del "Barras y estrellas por siempre" de Sousa, dos de los fundadores de Megabot, Gui Cavalcanti y Matt Oehrlein, explican, enfundados en banderas estadounidenses, que "al ser americanos" equiparon al Mark II "con unos cañones muy grandes" de "paintball" antes de desafiar a Suidobashi y a su modelo Kuratas a un duelo.
El video de respuesta de Kogoro Kurata, consejero delegado de la empresa nipona, tardó un día en llegar y en las imágenes, el ingeniero y creador principal del Kuratas, se enfunda a su vez en una enseña japonesa y acepta el reto de Megabot.
"Me parece muy interesante (la propuesta)", dice Kurata, que aún así considera que su competidor estadounidense podría haberlo "hecho mejor".
"Construir una cosa gigante y ponerle cañones... es tan americano. No podemos permitir que otro país gane; los robots gigantes son parte de la cultura nipona", dice con sorna antes de añadir que su intención es "mandar al desguace" al Mark II a puñetazo limpio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario